



La Unidad del Dolor persigue aliviar o reducir el dolor atendiendo a los pacientes a los que otros especialistas no han podido controlar después de haber suministrado todas las opciones terapéuticas disponibles. La finalidad es tratar el dolor de los pacientes y mejorar su calidad de vida, abordando el problema de una forma multidisciplinar.
Está formada por una mayoría de especialistas en Anestesiología, que se preocupan principalmente por escuchar atentamente al paciente cuando llega por primera vez a la consulta, analizar de manera exhaustiva su caso, destinar a su problema el tiempo necesario y ofrecerle la terapia más idónea para mitigar su dolor con el fin de que su calidad de vida mejore.
Hospital San Rafael y Nuestra Señora del Rosario y Beata cuentan con esta especialidad.